Al contrario de lo que se pretende, una lengua jamás es un problema y no debiera utilizarse para crearlo. Por eso hoy he decidido escribir en castellano, para que quien quiera entender, que entienda sin que tenga la necesidad de traducir.
Desde el PP, entre otros muchos despropósitos, se ha tenido la desfachatez de amenazar al Presidente del Parlamento de Cataluña. Se ha llegado al extremo de utilizar el hecho de tener hijos para coaccionarle. Inaudito, pero no me sorprende. Es una demostración más de la bajeza moral de aquellos que creen que en política todo vale.
“Las amenazas sólo son armas para el amenazado” (Leonardo da Vinci, 1452-1519). “Mientras se amenaza, descansa el amenazador” (Miguel de Cervantes, 1574-1616). “La mayor amenaza a nuestra democracia no viene de aquellos que abiertamente se oponen a nosotros, sino de aquellos que lo hacen en silencio junto a nosotros” (Thomas Paine, 1737-1809). “¿Pretende atemorizarme, viniendo a escucharme con esa seriedad? Yo no me asusto. Hay una especie de terquedad en mí, que nunca me permite que me intimide nadie. Por el contrario, mi valor crece cuando alguien intenta intimidarme.” (Jane Austin, 1775-1817). “La mayor amenaza es la pérdida de la esperanza” (Andy Weir, 1972).
No quiero acabar sin mencionar a la oposición. ¿He dicho oposición? Su inoperancia, permitiendo el proceder totalitario de un gobierno en minoría debiera ruborizarle; claro que para eso hay que tener vergüenza, pero por encima de todo, dignidad.
30/1/2018
Publicada a EL PERIÓDICO el 2/2/2018